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| Fuente: Una Antropóloga en la Luna. |
Por Salvatore Scimino & Gundhramns Hammer
10 de abril de 2014
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Aparecieron de la nada y se han instalado en el laberinto de cuevas de los diablos. No son cualquier cosa.
Los nuevos vecinos cagan mucho, huelen mal, producen gases apestosos día y noche y son delicados, bulliciosos, pendencieros, matones y sanguinarios.
Los residentes diablunos (i.e., relacionado con diablos) están incómodos con los nuevos vecinos llamados “humanos”.
Los vecinos residentes se han levantado en protesta por la plaga de humanos, motivo por el cual todos los diablos se han reunido para deliberar sobre el problema de la plaga de humanos, considerados como un peligro para la paz y tranquilidad de los que habitan en el infierno, uno de los pocos lugares donde aún se puede respirar un poco de paz ante el acoso de estos primates cagones (i.e., defecan demasiado) que invaden donde les quepa el culo.
El Diablo Mayor y su equipo protector han estado trabajando para encontrar la solución a la plaga de humanos.
Equis 66, el jefe en su colonia, ha tratado de calmar los nervios de los miembros de la comunidad diabluna y les ha prometido que la campaña de deshumanización comenzará de inmediato.
La empresa contratada por la Casa Mayor del Diablo Mayor se especializa en cazar humanos y trasladarlos al otro lado del universo donde estos bichos asquerosos se puedan instalar a sus anchas y puedan cagar a diestra y siniestra y matarse unos con otros al no haber otra cosa que sólo miembros de su maldita especie.
El mensaje de Equis 66 ha sido bien recibido por la comunidad de diablos.
Cada uno de los infiernodanos (i.e., ciudadanos del infierno) ha prometido colaborar en todo lo que pueda, especialmente informando y denunciando el lugar exacto de cualquier avistamiento de humanos en todos los rincones de la diablidad (i.e., comunidad de diablos) para erradicar esta plaga de humanos incómodos, cagones y malandrines.
Se espera que con la campaña anti-humanos que comenzará dentro de dos días, el orden y la paz vuelvan al infierno.
Por su parte el jefe de la comunidad de diablos, el señor Equis 66, ha decidido condecorar a cada uno de los Vigilantes del Order y Defensa de su comarca por haber detectado el problema de los humanos antes de que se hiciera más grave.
Según informaciones de la Casa Mayor, el problema de los humanos surgió cuando por primera vez fueron capturados dos elementos de esta especie altamente transgresora, es decir los humanos.
Los agentes vigilantes en seguida se pusieron en contacto con el Diablo Mayor de su institución.
Y estando éste ausente, los vigilantes se quejaron ante su gabinete pero la información se coló y resto del pueblo diabluno se enteró de la grave situación.
Fue entonces cuando corrió la alarma de la invasión de humanos y cundió el pánico entre los diablos.
Ante el ruido de los tambores de guerra a Equis 66 no le quedó más remedio que volver inmediatamente a su oficina y ponerse las botas para trabajar en su nueva misión.
Su respuesta fue efectiva y tajante para calmar los nervios de los miembros su comunidad.
Sólo queda esperar que acabe la campaña de deshumanización para celebrar las fiestas del festival del vino.
Todos los diablos están ansiosos y pendientes en saber el resultado final de la campaña de erradicación contra todos los humanos invasores. Cuando sepan que todo ha ido bien en la lucha anti-humanista, los diablos ya podrán dormir bien nuevamente.
Y así, de esa manera, los diabludanos (i.e., ciudadanos del infierno) ya no tendrían que andar con cuidado de no pisar cagadas de humanos.
Unas ratas que estaban comiendo migas en una esquina de una de las cuevas sonrieron.
Los gatos que a menudo reciben maltrato, abuso y tortura de los humanos (Fig. 1) se dijeron unos a otros:
- ¡Ojalá se los lleven a todos!
Las gallinas, los patos, los pavos, las vacas, los conejos, los caballos y resto de animales domésticos (Video 1) que sufren en las factorías y los mataderos, todos dijeron que estaban de acuerdo.
ADVERTENCIA: ¡IMAGENES GRAFICAS!
Video 1. La pesadilla de los animales en manos de los humanos.
Y las aves salvajes que estaban a la entrada del laberinto, ya hartas de aguantar tantos perdigonazos y balazos de los humanos (Video 2), danzaron y cantaron de alegría al oír tan buenas noticias.
Video 2. Tiro a las palomas en Pennsylvnia (USA).
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Aparecieron de la nada y se han instalado en el laberinto de cuevas de los diablos. No son cualquier cosa.
Los nuevos vecinos cagan mucho, huelen mal, producen gases apestosos día y noche y son delicados, bulliciosos, pendencieros, matones y sanguinarios.
Los residentes diablunos (i.e., relacionado con diablos) están incómodos con los nuevos vecinos llamados “humanos”.
Los vecinos residentes se han levantado en protesta por la plaga de humanos, motivo por el cual todos los diablos se han reunido para deliberar sobre el problema de la plaga de humanos, considerados como un peligro para la paz y tranquilidad de los que habitan en el infierno, uno de los pocos lugares donde aún se puede respirar un poco de paz ante el acoso de estos primates cagones (i.e., defecan demasiado) que invaden donde les quepa el culo.
El Diablo Mayor y su equipo protector han estado trabajando para encontrar la solución a la plaga de humanos.
Equis 66, el jefe en su colonia, ha tratado de calmar los nervios de los miembros de la comunidad diabluna y les ha prometido que la campaña de deshumanización comenzará de inmediato.
La empresa contratada por la Casa Mayor del Diablo Mayor se especializa en cazar humanos y trasladarlos al otro lado del universo donde estos bichos asquerosos se puedan instalar a sus anchas y puedan cagar a diestra y siniestra y matarse unos con otros al no haber otra cosa que sólo miembros de su maldita especie.
El mensaje de Equis 66 ha sido bien recibido por la comunidad de diablos.
Cada uno de los infiernodanos (i.e., ciudadanos del infierno) ha prometido colaborar en todo lo que pueda, especialmente informando y denunciando el lugar exacto de cualquier avistamiento de humanos en todos los rincones de la diablidad (i.e., comunidad de diablos) para erradicar esta plaga de humanos incómodos, cagones y malandrines.
Se espera que con la campaña anti-humanos que comenzará dentro de dos días, el orden y la paz vuelvan al infierno.
Por su parte el jefe de la comunidad de diablos, el señor Equis 66, ha decidido condecorar a cada uno de los Vigilantes del Order y Defensa de su comarca por haber detectado el problema de los humanos antes de que se hiciera más grave.
Según informaciones de la Casa Mayor, el problema de los humanos surgió cuando por primera vez fueron capturados dos elementos de esta especie altamente transgresora, es decir los humanos.
Los agentes vigilantes en seguida se pusieron en contacto con el Diablo Mayor de su institución.
Y estando éste ausente, los vigilantes se quejaron ante su gabinete pero la información se coló y resto del pueblo diabluno se enteró de la grave situación.
Fue entonces cuando corrió la alarma de la invasión de humanos y cundió el pánico entre los diablos.
Ante el ruido de los tambores de guerra a Equis 66 no le quedó más remedio que volver inmediatamente a su oficina y ponerse las botas para trabajar en su nueva misión.
Su respuesta fue efectiva y tajante para calmar los nervios de los miembros su comunidad.
Sólo queda esperar que acabe la campaña de deshumanización para celebrar las fiestas del festival del vino.
Todos los diablos están ansiosos y pendientes en saber el resultado final de la campaña de erradicación contra todos los humanos invasores. Cuando sepan que todo ha ido bien en la lucha anti-humanista, los diablos ya podrán dormir bien nuevamente.
Y así, de esa manera, los diabludanos (i.e., ciudadanos del infierno) ya no tendrían que andar con cuidado de no pisar cagadas de humanos.
Unas ratas que estaban comiendo migas en una esquina de una de las cuevas sonrieron.
Los gatos que a menudo reciben maltrato, abuso y tortura de los humanos (Fig. 1) se dijeron unos a otros:
- ¡Ojalá se los lleven a todos!
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| Figura 1. Gatos torturados en experimentos frankensteinianos. Fuente: ecologismo.com. |
Las gallinas, los patos, los pavos, las vacas, los conejos, los caballos y resto de animales domésticos (Video 1) que sufren en las factorías y los mataderos, todos dijeron que estaban de acuerdo.
ADVERTENCIA: ¡IMAGENES GRAFICAS!
Y las aves salvajes que estaban a la entrada del laberinto, ya hartas de aguantar tantos perdigonazos y balazos de los humanos (Video 2), danzaron y cantaron de alegría al oír tan buenas noticias.
Moraleja
La próxima vez que veas a un humano, examina tu corazón profundamente. Esmérate por buscar la Luz dentro de ti y dale vida.
Hagamos nuestra meta en la vida dar lo mejor de nosotros a todo y todos los que nos rodean. Mierda ya tenemos demasiada.
Referencias
Dos Veces Equis (2366). Manual de Vigilancia contra las Plagas de Humanos. Casa Mayor, Cueva Quinta Doblada. 366 p.
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http://e-rastrillo.blogspot.com.es/2012/01/somos-mas-diablos-que-los-diablos.html
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