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| Las carabelas de Cristobal Colón. Fuente: Oculto. |
Por Gundhramns Hammer
29 de septiembre de 2014
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En estas cuestiones de descubrir, todo el mundo está galopando en descubrir lo que ya está descubierto. La vida misma lo ha descubierto.
Pero si le queremos dar el crédito a aquellos que supuestamente han descubierto algo, en el caso del que conocemos ahora como el "Continente Americano", antes que Cristobal Colón ya habían llegado los vikingos y antes que éstos los polinesios y posiblemente los sumerios, los fenicios, los romanos, los chinos, algunos africanos occidentales, y quien sabe si también los egipcios y los persas, entre otros pueblos.
También, quién sabe si mucho más antes que todos los demás otros pueblos lo hicieron, pues según el investigador Arthur Posnansky, la ciudad de Tiahuanaco en el altiplano andino, cerca del lago Titicaca, en la más antigua del mundo. Cuenta con más de 12.000 años de antigüedad.
Algunos investigadores han avanzado otra hipótesis. Dicen que fueron los solutreanos, un pueblo paleolítico del sur de Francia, quienes primero llegaron a "Norte América", alrededor del año 17.000 a.C.
Y la historia no acaba aquí.
Incluso hay relatos de un imperio que existió a finales del Período Pleistoceno, allá por el año 14.000 mil a.C.
Dicen que estos marineros antiguos tenían una civilización muy adelantada y que mapearon el mundo entero. Cuentan que algunos de estos mapas estaban en el museo privado del rey Enrique el Navegante de Portugal.
Estos mapas eran un asunto de secreto de Estado para Portugal. Pero hubo una persona que logró colarse allí y sacar datos de esos mapas para alimentar sus ambiciones de exploración de nuevos mundos.
¿Quién? Nada menos que Cristobal Colón. Este intrépido explorador tenía muchos secretos en su saco. Este es uno de ellos.
En fin, podemos decir una cosa.
En realidad, el gran océano que conocemos como el "Atlántico" nunca ha sido una barrera sino una autopista marina para los pueblos antiguos, según algunos investigadores.
El problema es que nos rehusamos a aceptar la abundante evidencia al respecto. En nuestro caso, los viajes pre-colombinos transatlánticos (e.g., Sorenson & Johannessen, 2004).
O si a la mano escondida que controla la Tierra no le conviene que se sepa nada al respecto, lo tapará y callará el pico de los expertos, los cuales miedosos de perder su empleo lo harán, pues si lo pierden se acaba su chupadera académica.
Y si se atreven, serán ridiculizados y descreditados. Además, la gente no les creerá, pues los borregos humanos sólo creen lo que les machacan y sirven en el plato a cada rato a través de los medios de comunicación, los cuales son propiedad de la misma mano escondida.
Pero sea como sea, en cuanto al descubrimiento de "América", los mismos aborígenes ya estaban allí.
Y antes que estos aborígenes, ya los pavos (Melagris gallopavo), los bisontes (Bison bison), las palomas migratorias (Ectopistes migratorius), aves cruelmente asesinadas hasta la extinción por los colonizadores en "Norte América", entre muchos otros animales, ya estaban allí.
Asi es que esto de "quién descrubrió América" es un asunto relativo.
En realidad, la misma Fuerza de Vida lo descubrió y pobló con vida.
Sin embargo, para cerrar, podemos decir una cosa importante: que cuando Cristobal Colón "redescrubrió América", el "Viejo Continente" estaba listo, pues la puerta de las especias del Oriente (Constantinopla) había sido cerrada y caído en manos del imperio de los otomanos en 1453.
Necesitaba abrir otras rutas. Y comienza la lucha para encontrarlas.
Fue entonces cuando, la península "asiática" que conocemos hoy como "Europa" - la niña de los ojos anchos (griego, eurys, ancho, ops, ojo) - se cristalizó con el "descubrimiento" del "Nuevo Mundo".
Este es el verdadero mérito de Colón. Este explorador contribuyó a esta cristalización.
Por supuesto para la desdicha de los "indios". El resto es historia.
Vamos que este aniquilador de "indios americanos" era muy ambicioso pero también tenía huevos (cojones) para semejante aventura y además, un pacto con el diablo. Otro de sus secretos. Pero este es pan de otro saco.
Ahora echémosle un vistazo a uno de los tantos secretos de Cristobal Colón.
A continuación presentamos un documental de J.J. Benítez: El secreto de Colón (Video 1):
Video 1. El secreto de Colón con J.J. Benítez.
Agradecimientos
Agradecemos las conversaciones sobre el tema de exploraciones del mundo antiguo al Dr. H.M.G. von Österreich und von Toskana.
Referencias
Sorenson J. L. & Johannessen C.L. (2004). Scientific Evidence for Pre-Columbian Transoceanic Voyages. Sino-Platonic Papers, 133: 1-270.
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